Sigue nuestra receta para hacer un delicioso jarabe de uva casero, ideal como edulcorante natural para bebidas o como base para helados. La fermentación y la adición de canela o clavos dan un toque especial a este jarabe genuino y sabroso.
Comienza lavando cuidadosamente las uvas bajo agua corriente, luego separa los granos del racimo y colócalos en un recipiente grande.
Exprime suavemente los granos para extraer el jugo y deja fermentar el líquido obtenido durante una semana. Durante este período, revuelve dos veces al día con una cuchara de madera para ayudar al proceso de fermentación.
Al final de la semana, filtra el mosto usando un paño limpio o un trozo de tela, exprimiendo bien para recuperar todo el líquido.
Vierte el mosto en una olla de acero junto con el azúcar y lleva a ebullición. Hierve durante unos diez minutos, revolviendo constantemente con la cuchara de madera.
Una vez que la cocción haya terminado, retira del fuego y deja que el jarabe se enfríe por completo antes de embotellarlo.
Notas
Para darle un toque especial a tu jarabe de uva casero, puedes agregar algunas uvas enteras en la botella o aromatizar el jarabe con un palito de canela o unos clavos durante la fase de ebullición.