1. Cocina la pasta en abundante agua con sal siguiendo las instrucciones del paquete.

2. Una vez cocida, escurre la pasta y déjala enfriar a temperatura ambiente. Puedes hacerlo espolvoreándola con un velo de aceite de oliva y dándole vueltas de vez en cuando para evitar que se pegue.

3. Mientras tanto, corta los tomates en cubos y ponlos en un bol.

4. Agrega sal, pimienta y albahaca picada a los tomates.

5. Corta la mozzarella en cubos y agrégala al bol con los tomates.

6. También agrega las aceitunas negras deshuesadas.

7. Vierte un generoso chorrito de aceite de oliva extra virgen sobre la preparación y mezcla bien para dar sabor a todos los ingredientes.

8. Sazona la pasta con el aderezo preparado, revolviendo suavemente para distribuirlo uniformemente.

9. Deja reposar la pasta en el refrigerador durante al menos 30 minutos antes de servir, para que los sabores se mezclen bien.

10. Sirve la Pasta Fría Mediterránea como plato principal o como guarnición fresca y sabrosa.